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Nueva York.-
Edward Snowden, el espía arrepentido, hoy redimido luchador anti espionaje, dice que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) quiere conocer “todas las conversaciones y comportamientos del mundo”.
Averiguar todas las vidas ajenas del mundo no tiene que ver con “seguridad nacional”, parece una orgía perpetua con orgasmos interminables, entre un puñado de vouyeristas insaciables.
Snowden desnudó deslealtades, luchábamos con Google y Facebook contra restricciones en la Internet, mientras ellos compartían nuestros secretos con el gobierno. Nuestros “representantes politicos” autorizan que nos espíen.
Espiando a todo el mundo, admiten que murieron partidos, sindicatos, líderes y dirigentes, acepta que vivimos el momento del movimiento. Ayer espiando dirigentes desarticulaban cualquier movimiento, hoy sin líderes ni dirigentes, nos espían a todos para mantener sus empleos, porque no desarticularán el movimiento.
Y admiten que fracasó el ideal jacobino de la Revolución Francesa de alcanzar el poder, por medio de “representantes politicos”, para hacer las transformaciones necesarias “desde arriba”.
Lo único “transformado”, 300 años después, fue la vida de dirigentes-representantes y sus descendientes, la del resto empeoró.
El caso Snowden ilustra toda la crisis de la democracia representativa, somos 316 millones de habitantes con 535 “representantes” en el Congreso. Entre ellos 19 políticos profesionales, del “Comité Selecto de Inteligencia” del Senado, “legalizan” que nos espíen, “por nuestro propio bien” contra mandatos constitucionales.
Si “nuestros representantes” autorizan a que nos espíen, ¿a quiénes representa esta gente?
Julian Assange, de WikiLeaks, es prisionero-asilado en la embajada ecuatoriana de Londres, Bradley Manning, el soldado que le facilitó la información se pudre en la cárcel.
Como al personaje de Will Smith en “Enemy of the State” a Snowden lo “eliminaron” cancelándole toda identidad, “no existe” legalmente, no puede moverse. Devaluado a espía desertor varado en Moscú, Snowden es “negociable” en “intercambios de espías” entre rusos y estadounidenses.